Un convicto recién escapado de la cárcel entró a una casa y ató a una joven pareja que se encontraba durmiendo en la recámara.Tan pronto como vio una oportunidad, el marido se volvió hacia su joven y voluptuosa mujer, que estaba atada sobre la cama, vestida solo con un pequeño camisón, y le susurró:
- "Cariño, este tipo no ha visto a una mujer en años. Trata de cooperar con cualquier cosa que desee. Si quiere tener sexo contigo, síguele la corriente y haz como si te gustara. Nuestras vidas dependen de eso"
La esposa logró quitarse la mordaza y le respondió:"Cariño, estoy tan contenta de que pienses así, porque el tipo me acaba de decir que piensa que eres realmente guapo!"
No hay comentarios:
Publicar un comentario